martes, 15 de diciembre de 2009

Caleidoscopio

WWW.THEFAMOUSBLUERAINCOATFILM.DE (En construcción, muy pronto)



No lejos, reinaban la oscuridad y el silencio, las ventanas y las puertas estaban cerradas, salvo la abigarrada puerta del Paradise, donde acababan de entrar los músicos, con las botas de cuero empapadas, que empezarían a tocar a partir de las once, antes, el angosto Tom leía sin apenas vocalizar y sin ninguna entonación versos de Dylan Thomas, cada noche decía intentar arrebatarle el record a Dylan de beber en una misma noche dieciocho vasos de whisky, aunque, desde la primera vez que supo de la anécdota del poeta, lo superó cada madrugada con creces. Los músicos tocarían sin público hasta la una y media aproximadamente, hora donde solía llegar los primeros clientes.
...Casi todos los días llegaban viajeros de la alta sociedad, sobre todo en el tren nocturno de larga distancia, una vez Paul desde su cabina creyó entrever a Duke Ellington junto a Billy Holiday.


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Phto: Sr. Haro



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Alguna certeza ha de existir,
si no de amar
al menos
de no amar


Dylan Thomas



Photo: A. Petersen



Lo mismo da triunfar
que hacer gloriosa la derrota


Marqués de Bradomín

miércoles, 9 de diciembre de 2009

"Permanencia de los contaminantes en las capas más bajas de la atmósfera"

Mañana día 10, a eso de las 13 horas en Pumarejo#7, se hará una lectura especial, un espectáculo ineludible que lleva en el horno algunas semanas. Se adaptarán textos de Smog. A pesar de haber sido el último en elegir canción, inexplicable y afortunadamente seguía huérfana la joya I break horses. Habrá mucho más a lo largo del día, antesala de los actos por los Derechos Humanos que Amnistía prepara en la Alameda de Hércules(Sevilla), si les dejan, claro.





Tonight I´m swimming to my favourite island
and I don´t want to see you swimming behind

martes, 8 de diciembre de 2009

Postillas

El autor de este sitio duerme en un colchón. Me permite un graffiti. Ayer, solo y sólo ayer, hizo unos mil km, primera parada después de cinco horas en su Pumarejo y viaje rápido a Madrid, a visitar al salvavidas de su eterno tocayo de nombre y casi apellido. Dice que no se fia de los que apagan el motor de un coche antes de que acabe una canción, qué bobada, pensé, a las dos horas lo apunté para escribirlo aquí. Me gusta verles cara a cara, dándose una tregua de lo demás, discuten y coinciden a veces. Cruzado y seguro. Hablamos de lo bien que va el pueblo donde nacimos y conocimos, Castellar, de lo basado en hechos reales y de las postillas. Esconde la tapa como si fuera un arma nuclear. Buscamos un sitio rudo, un sitio donde a George Gff le gustara ir y salimos de allí bailando a los Kinks, de día y sin sol. A la una nos despiertan con una buena noticia, al último Loco no le importaría cambiar, por un rato, la capa por un impermeable azul. Vuelve a la cama. Piernas de marioneta.



Lourdes Cienfuegos M.